viernes, 7 de septiembre de 2012

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Historia de la tecnología





La rueda se inventó alrededor de 4000 a. C., y desde entonces ha sido una de las tecnologías más útiles. Esta rueda se expone en el Museo Nacional de Irán en Teherán.
La historia de la tecnología es la historia de la invención de herramientas y técnicas con un propósito práctico. La historia moderna está relacionada íntimamente con la historia de la ciencia, pues el descubrimiento de nuevos conocimientos ha permitido crear nuevas cosas y, recíprocamente, se han podido realizar nuevos descubrimientos científicos gracias al desarrollo de nuevas tecnologías, que han extendido las posibilidades de experimentación y adquisición del conocimiento.
Los artefactos tecnológicos son productos de una economía, una fuerza del crecimiento económico y una buena parte de la vida. Las innovaciones tecnológicas afectan y están afectadas por las tradiciones culturales de la sociedad. También son un medio de obtener poder militar.

Contenido

Edad de Piedra


Una variedad de herramientas de piedra.
Durante la Edad de Piedra, los humanos eran cazadores recolectores, un estilo de vida que comportaba un uso de herramientas y asentamientos que afectaba muy escasamente a los biotopos. Las primeras tecnologías de importancia estaban asociadas a la supervivencia, la obtención de alimentos y su preparación. El fuego, las herramientas de piedra, las armas y el atuendo fueron desarrollos tecnológicos de gran importancia de este periodo. En este tiempo apareció la música. Algunas culturas desarrollaron canoas con batangas capaces de aventurarse en el océano, lo que propició migraciones a través del archipiélago Malayo, atravesando el Océano Índico hasta Madagascar y también cruzando el Océano Pacífico, lo que requería conocer las corrientes oceánicas, los patrones del clima, navegación y cartas estelares. La fase principal de predominio de la economía cazadora-recolectora se llama Paleolítico y el final se denomina epipaleolítico o mesolítico; la Edad de Piedra posterior, durante la cual se desarrollaron los rudimentos de la tecnología agraria, se llama periodo Neolítico. Estas fueron las bases de la tecnología industrial moderna.

Edades de Cobre y Bronce

La Edad de Piedra desembocó en la Edad de los Metales tras la Revolución Neolítica. Esta revolución comportó cambios radicales en la tecnología agraria, que llevaron al desarrollo de la agricultura, la domesticación animal y los asentamientos permanentes. La combinación de estos factores posibilitó el desarrollo de la fundición de cobre y más tarde bronce. Esta corriente tecnológica empezó en el Creciente fértil, desde donde se difundió. Los descubrimientos no tenían, y todavía no tienen, carácter universal. El sistema de las tres edades no describe con precisión la historia de la tecnología de los grupos ajenos a Eurasia, y no puede aplicarse en algunas poblaciones aisladas como los sentinelese, los Spinifex y ciertas tribus amazónicas, que todavía emplean la tecnología de la Edad de piedra.

Edad de Hierro

La Edad de Hierro empezó tras el desarrollo de la tecnología necesaria para el trabajo del hierro, material que reemplazó al bronce y posibilitó la creación de herramientas más resistentes y baratas. En muchas culturas euroasiáticas la Edad de Hierro fue la última fase anterior al desarrollo de la escritura, aunque de nuevo no se puede decir que esto sea universal.

Civilizaciones antiguas y sus invenciones

Antiguo Egipto

Los Egipcios inventaron y usaron muchas máquinas simples, como el plano inclinado y la palanca, para ayudarse en las construcciones. El papel egipcio, hecho de papiro y la alfarería fueron exportados por la cuenca Mediterráneo.Sin embargo la rueda no aparecería hasta que invasores extranjeros trajeron con ellos carros. También desempeñaron un importante papel en el desarrollo de la navegación marítima o tecnología marítima, mediterránea, tanto en barcos como faros.

Antigua Grecia

Los griegos inventaron muchas tecnologías y mejoraron otras ya existentes, sobre todo durante el periodo helenístico. Herón de Alejandría inventó un motor a vapor básico y demostró que tenía conocimientos de sistemas mecánicos y neumáticos. Arquímedes inventó muchas máquinas. Los griegos fueron únicos en la era preindustrial por su capacidad de combinar las investigaciones científicas con el desarrollo de nuevas tecnologías. Un ejemplo es el tornillo de Arquímedes, que primero se concibió matemáticamente y más tarde se construyó. También inventaron la balista y computadoras analógicas primitivas, como el mecanismo de Antiquitera.[1] Los arquitectos griegos fueron los responsables de las primeras cúpulas y también los primeros en investigar el número áureo y su relación con la geometría y la arquitectura.
Aparte de la eolípila de Herón, los griegos fueron los primeros en inventar los molinos de viento y de agua, lo que les hizo pioneros en tres de los cuatro métodos de propulsión no animal anteriores a la Revolución industrial (el cuarto es la navegación), aunque sólo se usó la energía hidráulica.

Roma


Azada romana de hierro, de hace 2000 años. Este artefacto se encuentra expuesto en el Museo Field de Chicago.
Los romanos desarrollaron una agricultura sofisticada, mejoraron la tecnología del trabajo con hierro y de albañilería, mejoraron la construcción de carreteras (métodos que no quedaron obsoletos hasta el desarrollo del macadán en el siglo XIX), la ingeniería militar, la ingeniería civil, el hilado y el tejido con muchas máquinas diferentes como la cosechadora[cita requerida], que ayudaron a incrementar la productividad de muchos sectores de la economía romana.
Los ingenieros romanos fueron los primeros en construir arcos monumentales, anfiteatros, acueductos, baños públicos, puentes de piedra y criptas. Algunas invenciones romanas notables fueron el códice, el vidrio soplado y el hormigón. Como Roma está situada en una península volcánica cuya arena contiene granos cristalinos, el hormigón romano fue especialmente resistente al tiempo. Algunas de sus edificaciones se han mantenido en pie más de dos mil años.
La civilización romana estaba altamente urbanizada para los estándares pre-modernos. Muchas ciudades del Imperio tenían más de 100 000 habitantes, siendo Roma la más poblada de la antigüedad. Los rasgos de la vida urbana romana comprendían edificios de varios pisos, calles pavimentadas, retretes de cisterna públicos, ventanas de vidrio y calefacción en suelos y paredes. Los romanos entendieron la hidráulica y construyeron fuentes y obras hidráulicas, especialmente acueductos. Algunas termas se han conservado hasta la actualidad. Los romanos desarrollaron muchas tecnologías que se perdieron en la Edad Media y no se reinventaron hasta el siglo XIX y el XX.

India

La Civilización del Valle del Indo, situada en un área rica en recursos es relevante por su temprana aplicación de las tecnologías sanitaria y de planificación civil. Las ciudades del valle tienen unos de los primeros ejemplos de baños públicos, cloacas cerradas y graneros comunales.
La India antigua fue también puntera en la tecnología marítima. Un panel encontrado en Mohenjodaro, muestra una nave navegando. La construcción de barcos se describe con detalle en el Yukti Kalpa Taru, un texto Indio antiguo sobre la construcción de embarcaciones.
La arquitectura y técnicas de construcción indias, llamadas 'Vaastu Shastra', sugieren una comprensión profunda de la ingeniería de materiales, la hidrología y los servicios sanitarios. La cultura india fue también pionera en el uso de tintes vegetales, como el índigo y los procedentes del cinabrio. Muchos de estos tintes se emplearon en pinturas y esculturas. El uso de perfumes demuestra conocimientos químicos, especialmente de los procesos de destilación y purificación.

China

De acuerdo con el investigador Joseph Needham, los chinos realizaron muchos inventos y descubrimientos primerizos. Algunas innovaciones tecnológicas chinas de importancia fueron los primeros sismógrafos, cerillas, el papel, el hierro colado, el arado de hierro, la sembradora multitubo, el puente colgante, la carretilla, el empleo del gas natural como combustible, la brújula, el mapa de relieve, la hélice, la ballesta, el carro que apunta hacia el sur(?) y la pólvora. Otros descubrimientos e invenciones chinos, pero de la Edad Media, son el barco de palas, la impresión xilográfica, los tipos móviles, la pintura fosforescente, la transmisión de cadena, el mecanismo de escape y la rueda de hilar.

Incas

Los Incas tenían grandes conocimientos de ingeniería, incluso para los estándares actuales. Un ejemplo de esto es el empleo de piedras de más de una tonelada en sus construcciones (por ejemplo en Machu Picchu, Perú), puestas una junto a la otra ajustando casi perfectamente. Los pueblos tenían canales de irrigación y sistemas de drenaje, lo que hacía muy eficiente a la agricultura. Aunque algunos afirman que los incas fueron los primeros en inventar la hidroponía[cita requerida], la tecnología agraria, aunque avanzada, estaba todavía basada en el suelo. Esta tecnología, que comprendía el uso de bancales escalonados, permitía obtener gran rendimiento del suelo de tierras situadas en fuertes pendientes.

Mayas

Aunque la Civilización Maya no tenía tecnología metalúrgica ni había inventado la rueda, desarrollaron complejos sistemas de escritura y astrología y crearon trabajos esculturales de piedra. Como los incas, tenían buenas tecnologías de construcción y agrarias, aunque ya tenían varios conocimientos de orden astronómico que sabemos hoy en día.

Edades Media y Moderna

Medievo


Fundíbulo medieval.
La tecnología de la Edad Media se puede describir como una simbiosis entre traditio et innovatio. Aunque la tecnología medieval se ha considerado durante mucho tiempo un paso atrás en la evolución de la tecnología occidental, en algunos casos en un intento de algunos autores de denunciar a la iglesia como antagonista del progreso científico (véase el mito de la tierra plana), una generación de medievalistas de los que Lynn White puede ser su cabeza más visible pusieron énfasis desde la década de 1940 en el carácter innovador de muchas técnicas medievales. Algunas contribuciones medievales son por ejemplo los relojes mecánicos, las gafas y los molinos de viento. La gente de la edad media inventaron también algunos objetos más discretos, como el botón o la marca al agua. En navegación, los cimientos de la Era de los Descubrimientos se asientan en la introducción (aunque no invención) del astrolabio, la brújula, la vela latina y el timón de codaste.
También se hicieron avances de importancia en la tecnología militar con la invención de la armadura completa de placas metálicas, las ballestas de acero, el fundíbulo y el cañón, aunque quizá se conozca más a la Edad Media por su legado arquitectónico: mientras la invención del arco apuntado, la bóveda de nervaduras auspiciaron el estilo gótico, las omnipresentes fortificaciones medievales dieron a este tiempo el nombre de «Edad de los Castillos».

Principio de la Edad Moderna

El principio de la edad moderna se extiende desde la Toma de Constantinopla por los turcos en 1453 hasta la Revolución francesa en 1789, o sea un período de 336 años. Los turcos en el 1300 conquistan Asia Menor bajo el mando del sultán, Osman (de ahí el nombre otomano). Su hijo Orjàn logra armar un poderoso ejército, como una especie de legión extranjera, y conquista mayores territorios en la zona de los Balcanes. Muchos católicos de esos territorios se convierten al islamismo. En 1389 los turcos vencen a los serbios (católicos) en el Campo de Mirlos, como venganza por la muerte de sultán en manos de un terrorista serbio. Esa batalla es considerada sagrada por los serbios y aun hoy la recuerdan. Tampoco perdonan a las familias que en aquel momento se convirtieron a la religión musulmana.
Como se dijo, en 1453 toman Constantinopla, dando lugar a la caída definitiva del Imperio romano de Oriente. Los historiadores consideran este acontecimiento como el fin de la Historia Antigua. El Imperio otomano perdurará hasta el final de la Primera Guerra Mundial en 1918.

Revolución industrial

La Revolución industrial es un periodo histórico comprendido entre la segunda mitad del siglo XVIII y principios del XIX, en el que el Reino Unido en primer lugar, y el resto de la Europa continental después, sufren el mayor conjunto de transformaciones socioeconómicas, tecnológicas y culturales de la Historia de la humanidad, desde el Neolítico.
La economía basada en el trabajo manual fue reemplazada por otra dominada por la industria y la manufactura. La Revolución comenzó con la mecanización de las industrias textiles y el desarrollo de los procesos del hierro. La expansión del comercio fue favorecida por la mejora de las rutas de transportes y posteriormente por el nacimiento del ferrocarril. Las innovaciones tecnológicas más importantes fueron la máquina de vapor y la denominada Spinning Jenny, una potente máquina relacionada con la industria textil. Estas nuevas máquinas favorecieron enormes incrementos en la capacidad de producción.
La producción y desarrollo de nuevos modelos de maquinaria las dos primeras décadas del siglo XIX facilitó la manufactura en otras industrias e incrementó también su producción.

Siglo XIX

El siglo XIX produjo grandes avances en las tecnologías de transporte, construcción y comunicaciones. El motor a vapor, que había existido en su forma moderna desde el siglo XVIII se aplicó al barco de vapor y al ferrocarril. El telégrafo también se empleó por primera vez con resultados prácticos en el siglo XIX. Otra tecnología que vio la luz en el siglo XIX fue la lámpara incandescente. En el astillero de Portsmouth fue donde, al fabricar poleas para embarcaciones completamente mediante máquinas, se inició la era de la producción en masa. Las máquinas herramientas se empezaron a emplear para fabricar nuevas máquinas en la primera década del siglo, y sus principales investigadores fueron Richard Roberts y Joseph Whitworth. Los barcos de vapor finalmente se fabricaron completamente de metal y desempañaron un papel de importancia en la abertura del comercio entre Japón, China y occidente. Charles Babbage concibió la computación mecánica, pero logró que diera frutos. La Segunda Revolución Industrial de finales del siglo XIX vio el rápido desarrollo de las tecnologías química, eléctrica, petrolífera y del acero y su conexión con la investigación tecnológica altamente vertebrada.

Siglo XX

La tecnología del siglo XX se desarrolló rápidamente. Las tecnologías de comunicaciones, transporte, la difusión de la educación, el empleo del método científico y las inversiones en investigación contribuyeron al avance de la ciencia y la tecnología modernas. Algunas tecnologías como la computación se desarrollaron tan rápido como lo hicieron en parte debido a las guerras o a la amenaza de ellas, pues hubo muchos avances científicos asociados a la investigación y el desarrollo militar, como la computación electrónica. La radiocomunicación, el radar y la grabación de sonido fueron tecnologías clave que allanaron el camino a la invención del teléfono, el fax y el almacenamiento magnético de datos. Las mejoras en las tecnologías energética y de motores también fueron enormes e incluyen el aprovechamiento de la energía nuclear, avance resultado del Proyecto Manhattan. Mediante el uso de computadores y laboratorios avanzados los científicos modernos han recombinado ADN.

Siglo XXI

En los pocos años que han transcurrido del siglo XXI la tecnología ha avanzado rápidamente, progresando en casi todos los campos de la ciencia. La tasa de desarrollo de los computadores es un ejemplo de la aceleración del progreso tecnológico, lo que lleva a algunos a pronosticar el advenimiento de una singularidad tecnológica en este siglo.

Medida del progreso tecnológico

Muchos sociólogos y antropólogos han creado teorías sociales concernientes a la evolución social y cultural. Algunos, como Lewis H. Morgan, Leslie White y Gerhard Lenski parten de una aproximación más moderna y se centran en la información. Cuanta más información y conocimiento posee una sociedad, más avanzada es. Identifica cuatro etapas del desarrollo humano, basadas en los avances en la historia de la comunicación. En la primera etapa la información se transmite por genes. En la segunda, los humanos pueden aprender y transmitir información mediante la experiencia. En la tercera empiezan a emplear señales y desarrollar la lógica. En la cuarta crean señales, desarrollan la lengua y la escritura. Los avances en la tecnología de comunicaciones se traducen en avances en el sistema económico, el sistema político, la distribución de bienes, la desigualdad social y otros aspectos de la vida social.



Día del amor y la amistad.




Día de San Valentín

Día de San Valentín
San valentino.png
Valentín de Terni.
Origen de la celebraciónReino Unido, alrededor del siglo XIV
Día de celebración14 de febrero
Celebrado desdeSiglo XIV
Lugar de celebraciónInternacional
Retrato del poeta inglés Geoffrey Chaucer (1343-1400), de autor desconocido, en el libro Regimiento de príncipes (1412) de Thomas Occleve (1368-1426).
El Día de San Valentín es una celebración tradicional de países anglosajones que se ha ido implantando en otros países a lo largo del siglo XX principalmente en la que las parejas de enamorados expresan su amor y cariño mutuamente. Se celebra el 14 de febreroonomástico de San Valentín. En algunos países se conoce como Día de los Enamorados y en otros como Día del Amor y la Amistad.[cita requerida]
En Angloamérica hacia 1840, Esther A. Howland comenzó a vender las primeras tarjetas postales masivas de San Valentín, conocidas como «valentines», con símbolos como la forma del corazón o de Cupido, aunque con el auge de Internet se ha extendido la costumbre de intercambiarpostales virtuales. También en este día es común la tradición de regalar rosas a aquellas personas a las que se tiene un especial afecto.
Existen diversas teorías que otorgan a esta fecha el origen del Día de los Enamorados. En los países nórdicos es durante estas fechas cuando se emparejan y aparean los pájaros, de ahí que este periodo se vea como un símbolo de amor y de creación.
Algunos creen que es una fiesta cristianizada del paganismo, ya que en la antigua Roma se realizaba la adoración al dios del amor, cuyo nombre griego era Eros y a quien los romanos llamaban Cupido. En esta celebración se pedían los favores del dios a través de regalos u ofrendas para conseguir así encontrar al enamorado ideal.

San Valentín era un sacerdote que hacia el siglo III ejercía en Roma. Gobernaba el emperador Claudio II, quien decidió prohibir la celebración de matrimonios para los jóvenes, porque en su opinión los solteros sin familia eran mejores soldados, ya que tenían menos ataduras.
El sacerdote consideró que el decreto era injusto y desafió al emperador. Celebraba en secreto matrimonios para jóvenes enamorados (de ahí se ha popularizado que San Valentín sea el patrón de los enamorados). El emperador Claudio se enteró y como San Valentín gozaba de un gran prestigio en Roma, el emperador lo llamó a Palacio. San Valentín aprovechó aquella ocasión para hacer proselitismo del cristianismo.1
Aunque en un principio Claudio II mostró interés, el ejército y el Gobernador de Roma, llamado Calpurnio, le persuadieron para quitárselo de la cabeza.1
El emperador Claudio dio entonces orden de que encarcelasen a Valentín. Entonces, el oficial Asterius, encargado de encarcelarle, quiso ridiculizar y poner a prueba a Valentín. Le retó a que devolviese la vista a una hija suya, llamada Julia, que nació ciega. Valentín aceptó y en nombre del Señor, le devolvió la vista.1
Este hecho convulsionó a Asterius y su familia, quienes se convirtieron al cristianismo. De todas formas, Valentín siguió preso y el débil emperador Claudio finalmente ordenó que lo martirizaran y ejecutaran el 14 de febrero del año 270. La joven Julia, agradecida al santo, plantó un almendro de flores rosadas junto a su tumba. De ahí que el almendro sea símbolo de amor y amistad duraderos.1









Blancanieves
Había una vez, en pleno invierno, una reina que se dedicaba a la costura sentada cerca de una ventana con marco de ébano negro. Los copos de nieve caían del cielo como plumones. Mirando nevar se pinchó un dedo con su aguja y tres gotas de sangre cayeron en la nieve. Como el efecto que hacía el rojo sobre la blanca nieve era tan bello, la reina se dijo. -¡Ojalá tuviera una niña tan blanca como la nieve, tan roja como la sangre y tan negra como la madera de ébano!
Poco después tuvo una niñita que era tan blanca como la nieve, tan encarnada como la sangre y cuyos cabellos eran tan negros como el ébano. Por todo eso fue llamada Blancanieves. Y al nacer la niña, la reina murió. Un año más tarde el rey tomó otra esposa. Era una mujer bella pero orgullosa y arrogante, y no podía soportar que nadie la superara en belleza. Tenía un espejo maravilloso y cuando se ponía frente a él, mirándose le preguntaba: ¡Espejito, espejito de mi habitación! ¿Quién es la más hermosa de esta región? Entonces el espejo respondía: La Reina es la más hermosa de esta región. Ella quedaba satisfecha pues sabía que su espejo siempre decía la verdad. Pero Blancanieves crecía y embellecía cada vez más; cuando alcanzó los siete años era tan bella como la clara luz del día y aún más linda que la reina. Ocurrió que un día cuando le preguntó al espejo:
¡Espejito, espejito de mi habitación! ¿Quién es la más hermosa de esta región? el espejo respondió: La Reina es la hermosa de este lugar, pero la linda Blancanieves lo es mucho más. Entonces la reina tuvo miedo y se puso amarilla y verde de envidia. A partir de ese momento, cuando veía a Blancanieves el corazón le daba un vuelco en el pecho, tal era el odio que sentía por la niña. Y su envidia y su orgullo crecían cada día más, como una mala hierba, de tal modo que no encontraba reposo, ni de día ni de noche. Entonces hizo llamar a un cazador y le dijo: -Lleva esa niña al bosque; no quiero que aparezca más ante mis ojos. La matarás y me traerás sus pulmones y su hígado como prueba. El cazador obedeció y se la llevó, pero cuando quiso atravesar el corazón de Blancanieves, la niña se puso a llorar y exclamó: -¡Mi buen cazador, no me mates!; correré hacia el bosque espeso y no volveré nunca más.
Como era tan linda el cazador tuvo piedad y dijo: -¡Corre, pues, mi pobre niña! Pensaba, sin embargo, que las fieras pronto la devorarían. No obstante, no tener que matarla fue para él como si le quitaran un peso del corazón. Un cerdito venía saltando; el cazador lo mató, extrajo sus pulmones y su hígado y los llevó a la reina como prueba de que había cumplido su misión. El cocinero los cocinó con sal y la mala mujer los comió creyendo comer los pulmones y el hígado de Blancanieves. Por su parte, la pobre niña se encontraba en medio de los grandes bosques, abandonada por todos y con tal miedo que todas las hojas de los árboles la asustaban. No tenía idea de cómo arreglárselas y entonces corrió y corrió sobre guijarros filosos y a través de las zarzas. Los animales salvajes se cruzaban con ella pero no le hacían ningún daño. Corrió hasta la caída de la tarde; entonces vio una casita a la que entró para descansar. En la cabañita todo era pequeño, pero tan lindo y limpio como se pueda imaginar. Había una mesita pequeña con un mantel blanco y sobre él siete platitos, cada uno con su pequeña cuchara, más siete cuchillos, siete tenedores y siete vasos, todos pequeños. A lo largo de la pared estaban dispuestas, una junto a la otra, siete camitas cubiertas con sábanas blancas como la nieve. Como tenía mucha hambre y mucha sed, Blancanieves comió trozos de legumbres y de pan de cada platito y bebió una gota de vino de cada vasito. Luego se sintió muy cansada y se quiso acostar en una de las camas. Pero ninguna era de su medida; una era demasiado larga, otra un poco corta, hasta que finalmente la séptima le vino bien. Se acostó, se encomendó a Dios y se durmió. Cuando cayó la noche volvieron los dueños de casa; eran siete enanos que excavaban y extraían metal en las montañas. Encendieron sus siete farolitos y vieron que alguien había venido, pues las cosas no estaban en el orden en que las habían dejado. El primero dijo: -¿Quién se sentó en mi sillita? El segundo: -¿Quién comió en mi platito? El tercero: -¿Quién comió de mi pan? El cuarto: -¿Quién comió de mis legumbres? El quinto. -¿Quién pinchó con mi tenedor? El sexto: -¿Quién cortó con mi cuchillo? El séptimo: -¿Quién bebió en mi vaso? Luego el primero pasó su vista alrededor y vio una pequeña arruga en su cama y dijo: -¿Quién anduvo en mi lecho? Los otros acudieron y exclamaron: -¡Alguien se ha acostado en el mío también! Mirando en el suyo, el séptimo descubrió a Blancanieves, acostada y dormida. Llamó a los otros, que se precipitaron con exclamaciones de asombro. Entonces fueron a buscar sus siete farolitos para alumbrar a Blancanieves. -¡Oh, mi Dios -exclamaron- qué bella es esta niña! Y sintieron una alegría tan grande que no la despertaron y la dejaron proseguir su sueño. El séptimo enano se acostó una hora con cada uno de sus compañeros y así pasó la noche. Al amanecer, Blancanieves despertó y viendo a los siete enanos tuvo miedo. Pero ellos se mostraron amables y le preguntaron. -¿Cómo te llamas?
-Me llamo Blancanieves -respondió ella. -¿Como llegaste hasta nuestra casa? Entonces ella les contó que su madrastra había querido matarla pero el cazador había tenido piedad de ella permitiéndole correr durante todo el día hasta encontrar la casita. Los enanos le dijeron: -Si quieres hacer la tarea de la casa, cocinar, hacer las camas, lavar, coser y tejer y si tienes todo en orden y bien limpio puedes quedarte con nosotros; no te faltará nada. -Sí -respondió Blancanieves- acepto de todo corazón. Y se quedó con ellos. Blancanieves tuvo la casa en orden. Por las mañanas los enanos partían hacia las montañas, donde buscaban los minerales y el oro, y regresaban por la noche. Para ese entonces la comida estaba lista. Durante todo el día la niña permanecía sola; los buenos enanos la previnieron: -¡Cuídate de tu madrastra; pronto sabrá que estás aquí! ¡No dejes entrar a nadie! La reina, una vez que comió los que creía que eran los pulmones y el hígado de Blancanieves, se creyó de nuevo la principal y la más bella de todas las mujeres. Se puso ante el espejo y dijo:
¡Espejito, espejito de mi habitación! ¿Quién es la más hermosa de esta región? Entonces el espejo respondió. Pero, pasando los bosques, en la casa de los enanos, la linda Blancanieves lo es mucho más. La Reina es la más hermosa de este lugar La reina quedó aterrorizada pues sabía que el espejo no mentía nunca. Se dio cuenta de que el cazador la había engañado y de que Blancanieves vivía. Reflexionó y buscó un nuevo modo de deshacerse de ella pues hasta que no fuera la más bella de la región la envidia no le daría tregua ni reposo. Cuando finalmente urdió un plan se pintó la cara, se vistió como una vieja buhonera y quedó totalmente irreconocible. Así disfrazada atravesó las siete montañas y llegó a la casa de los siete enanos, golpeó a la puerta y gritó: -¡Vendo buena mercadería! ¡Vendo! ¡Vendo! Blancanieves miró por la ventana y dijo: -Buen día, buena mujer. ¿Qué vende usted?
-Una excelente mercadería -respondió-; cintas de todos colores. La vieja sacó una trenzada en seda multicolor, y Blancanieves pensó: -Bien puedo dejar entrar a esta buena mujer. Corrió el cerrojo para permitirle el paso y poder comprar esa linda cinta. -¡Niña -dijo la vieja- qué mal te has puesto esa cinta! Acércate que te la arreglo como se debe. Blancanieves, que no desconfiaba, se colocó delante de ella para que le arreglara el lazo. Pero rápidamente la vieja lo oprimió tan fuerte que Blancanieves perdió el aliento y cayó como muerta. -Y bien -dijo la vieja-, dejaste de ser la más bella. Y se fue. Poco después, a la noche, los siete enanos regresaron a la casa y se asustaron mucho al ver a Blancanieves en el suelo, inmóvil. La levantaron y descubrieron el lazo que la oprimía. Lo cortaron y Blancanieves comenzó a respirar y a reanimarse poco a poco. Cuando los enanos supieron lo que había pasado dijeron:
-La vieja vendedora no era otra que la malvada reina. ¡Ten mucho cuidado y no dejes entrar a nadie cuando no estamos cerca! Cuando la reina volvió a su casa se puso frente al espejo y preguntó: ¡Espejito, espejito, de mi habitación! ¿Quién es la más hermosa de esta región? Entonces, como la vez anterior, respondió: La Reina es la más hermosa de este lugar, Pero pasando los bosques, en la casa de los enanos, la linda Blancanieves lo es mucho más. Cuando oyó estas palabras toda la sangre le afluyó al corazón. El terror la invadió, pues era claro que Blancanieves había recobrado la vida. -Pero ahora -dijo ella- voy a inventar algo que te hará perecer. Y con la ayuda de sortilegios, en los que era experta, fabricó un peine envenenado. Luego se disfrazó tomando el aspecto de otra vieja. Así vestida atravesó las siete montañas y llegó a la casa de los siete enanos. Golpeó a la puerta y gritó: -¡Vendo buena mercadería! ¡Vendo! ¡Vendo! Blancanieves miró desde adentro y dijo: -Sigue tu camino; no puedo dejar entrar a nadie. -Al menos podrás mirar -dijo la vieja, sacando el peine envenenado y levantándolo en el aire. Tanto le gustó a la niña que se dejó seducir y abrió la puerta. Cuando se pusieron de acuerdo sobre la compra la vieja le dilo: -Ahora te voy a peinar como corresponde. La pobre Blancanieves, que nunca pensaba mal, dejó hacer a la vieja pero apenas ésta le había puesto el peine en los cabellos el veneno hizo su efecto y la pequeña cayó sin conocimiento. -¡Oh, prodigio de belleza -dijo la mala mujer ahora sí que acabé contigo! Por suerte la noche llegó pronto trayendo a los enanos con ella. Cuando vieron a Blancanieves en el suelo, como muerta, sospecharon enseguida de la madrastra. Examinaron a la niña y encontraron el peine envenenado. Apenas lo retiraron, Blancanieves volvió en sí y les contó lo que había sucedido. Entonces le advirtieron una vez más que debería cuidarse y no abrir la puerta a nadie.
En cuanto llegó a su casa la reina se colocó frente al espejo y dijo: ¡Espejito, espejito de mi habitación! ¿Quién es la más hermosa de esta región? Y el espejito, respondió nuevamente: La Reina es la más hermosa de este lugar. Pero pasando los bosques, en la casa de los enanos, la linda Blancanieves lo es mucho más. La reina al oír hablar al espejo de ese modo, se estremeció y tembló de cólera. -Es necesario que Blancanieves muera -exclamó aunque me cueste la vida a mí misma. Se dirigió entonces a una habitación escondida y solitaria a la que nadie podía entrar y fabricó una manzana envenenada. Exteriormente parecía buena, blanca y roja y tan bien hecha que tentaba a quien la veía; pero apenas se comía un trocito sobrevenía la muerte. Cuando la manzana estuvo pronta, se pintó la cara, se disfrazó de campesina y atravesó las siete montañas hasta llegar a la casa de los siete enanos.
Golpeó. Blancanieves sacó la cabeza por la ventana y dijo: -No puedo dejar entrar a nadie; los enanos me lo han prohibido. -No es nada -dijo la campesina- me voy a librar de mis manzanas. Toma, te voy a dar una. -No-dijo Blancanieves -tampoco debo aceptar nada. -¿Ternes que esté envenenada? -dijo la vieja-; mira, corto la manzana en dos partes; tú comerás la parte roja y yo la blanca. La manzana estaba tan ingeniosamente hecha que solamente la parte roja contenía veneno. La bella manzana tentaba a Blancanieves y cuando vio a la campesina comer no pudo resistir más, estiró la mano y tomó la mitad envenenada. Apenas tuvo un trozo en la boca, cayó muerta. Entonces la vieja la examinó con mirada horrible, rió muy fuerte y dijo. -Blanca como la nieve, roja como la sangre, negra como el ébano. ¡Esta vez los enanos no podrán reanimarte! Vuelta a su casa interrogó al espejo: ¡Espejito, espejito de mi habitación!
¿Quién es la más hermosa de esta región? Y el espejo finalmente respondió. La Reina es la más hermosa de esta región. Entonces su corazón envidioso encontró reposo, si es que los corazones envidiosos pueden encontrar alguna vez reposo. A la noche, al volver a la casa, los enanitos encontraron a Blancanieves tendida en el suelo sin que un solo aliento escapara de su boca: estaba muerta. La levantaron, buscaron alguna cosa envenenada, aflojaron sus lazos, le peinaron los cabellos, la lavaron con agua y con vino pelo todo esto no sirvió de nada: la querida niña estaba muerta y siguió estándolo. La pusieron en una parihuela. Se sentaron junto a ella y durante tres días lloraron. Luego quisieron enterrarla pero ella estaba tan fresca como una persona viva y mantenía aún sus mejillas sonrosadas. Los enanos se dijeron: -No podemos ponerla bajo la negra tierra. E hicieron un ataúd de vidrio para que se la pudiera ver desde todos los ángulos, la pusieron adentro e inscribieron su nombre en letras de oro proclamando que era hija de un rey. Luego expusieron el ataúd en la montaña. Uno de ellos permanecería siempre a su lado para cuidarla. Los animales también vinieron a llorarla: primero un mochuelo, luego un cuervo y más tarde una palomita. Blancanieves permaneció mucho tiempo en el ataúd sin descomponerse; al contrario, parecía dormir, ya que siempre estaba blanca como la nieve, roja como la sangre y sus cabellos eran negros como el ébano. Ocurrió una vez que el hijo de un rey llegó, por azar, al bosque y fue a casa de los enanos a pasar la noche. En la montaña vio el ataúd con la hermosa Blancanieves en su interior y leyó lo que estaba escrito en letras de oro. Entonces dijo a los enanos: -Denme ese ataúd; les daré lo que quieran a cambio. -No lo daríamos por todo el oro del mundo respondieron los enanos. -En ese caso -replicó el príncipe- regálenmelo pues no puedo vivir sin ver a Blancanieves. La honraré, la estimaré como a lo que más quiero en el mundo.
Al oírlo hablar de este modo los enanos tuvieron piedad de él y le dieron el ataúd. El príncipe lo hizo llevar sobre las espaldas de sus servidores, pero sucedió que éstos tropezaron contra un arbusto y como consecuencia del sacudón el trozo de manzana envenenada que Blancanieves aún conservaba en su garganta fue despedido hacia afuera. Poco después abrió los ojos, levantó la tapa del ataúd y se irguió, resucitada. -¡Oh, Dios!, ¿dónde estoy? -exclamó. -Estás a mi lado -le dijo el príncipe lleno de alegría. Le contó lo que había pasado y le dijo: -Te amo como a nadie en el mundo; ven conmigo al castillo de mi padre; serás mi mujer. Entonces Blancanieves comenzó a sentir cariño por él y se preparó la boda con gran pompa y magnificencia. También fue invitada a la fiesta la madrastra criminal de Blancanieves. Después de vestirse con sus hermosos trajes fue ante el espejo y preguntó: ¡Espejito, espejito de mi habitación! ¿Quién es la más hermosa de esta región?
El espejo respondió: La Reina es la más hermosa de este lugar; pero la joven Reina lo es mucho más. Entonces la mala mujer lanzó un juramento y tuvo tanto, tanto miedo, que no supo qué hacer. Al principio no quería ir de ningún modo a la boda. Pero no encontró reposo hasta no ver a la joven reina. Al entrar reconoció a Blancanieves y la angustia y el espanto que le produjo el descubrimiento la dejaron clavada al piso sin poder moverse. Pero ya habían puesto zapatos de hierro sobre carbones encendidos y luego los colocaron delante de ella con tenazas. Se obligó a la bruja a entrar en esos zapatos incandescentes y a bailar hasta que le llegara la muerte.

Cuento original de los Hermanos Grimm

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